En el marco del Día Mundial de la Alegría, un mural en la estación Retiro de la Línea C de Subte nos invita a arrancar el día con una sonrisa, reflejando la energía positiva de más de 800 pasajeros.

La estación Retiro, uno de los puntos más transitados del Subte de Buenos Aires, no solo es el punto de partida para miles de pasajeros, sino también el escenario de una intervención artística que contagia optimismo. El mural “La sonrisa”, del artista Fernando Puelles, transforma la pared del andén en un vibrante collage compuesto por las caras de 800 personas. Un homenaje visual a la alegría que, además, celebra el Día Mundial de la Alegría, conmemorado cada 1 de agosto desde 2010.

“El arte tiene el poder de iluminar hasta los momentos más rutinarios”, afirmó Puelles sobre su obra. “Mi objetivo fue que al pasar por esta estación, cada persona se detenga un segundo a observar y a conectar con esa energía positiva. La sonrisa es universal, no tiene barreras ni fronteras”. Y es que no es para menos, la intervención tiene un impacto visual notable, con 2.20 metros de ancho por 3.50 metros de largo, y un diseño tan fresco que transforma el espacio en una galería subterránea llena de vida.

El mural “La sonrisa” se caracteriza por su uso de la técnica de collage, que consiste en ensamblar piezas de fotos de pasajeros reales, cada una aportando una expresión única, pero todas unidas por el concepto común de la felicidad. Las caras, tomadas de manera espontánea y auténtica, se entrelazan para formar la imagen de un bebé feliz, una figura simbólica de alegría pura. Este tipo de intervención, además de embellecer el espacio, tiene la intención de crear un vínculo emocional con los pasajeros, que al transitar por la estación no solo se encuentran con un mural, sino con una experiencia que los conecta con su propio bienestar.

Una de las características que destaca a esta obra es la participación activa de los mismos usuarios del subte, quienes se convierten en parte de la obra de arte sin siquiera haberlo planeado. Esto genera un ambiente de integración e inclusión, donde cada rostro, aunque anónimo, tiene un espacio de protagonismo dentro de la pieza.

El Día Mundial de la Alegría, conmemoración impulsada desde 2010 y celebrada en catorce países como Chile, Brasil y Argentina, cobra más sentido con intervenciones como esta. Este mural, que se alinea con la idea de que la alegría es un sentimiento que debe cultivarse a diario, viene a recordarnos que el camino hacia la felicidad puede ser tan sencillo como una sonrisa. En medio de la rutina diaria, muchas veces nos olvidamos de disfrutar esos pequeños momentos que hacen que el día valga la pena, pero una simple sonrisa puede ser el primer paso.

Además de su componente artístico, este mural invita a reflexionar sobre la importancia de crear espacios que fomenten el bienestar colectivo. En las ciudades, donde la presión de la vida diaria se siente con fuerza, encontrar algo que nos regale una pausa emocional puede marcar la diferencia. Y la estación Retiro, a través de este mural, ha logrado hacerlo de manera brillante.

Con una obra que lleva la alegría a todos los que pasan por allí, la estación Retiro se convierte en un refugio subterráneo de optimismo. Cada sonrisa en el mural es un recordatorio de que la felicidad está al alcance de todos, y que nunca está de más dedicar un momento al buen humor, sobre todo cuando el día comienza en el subte.