Con motivo del Día Mundial del Ambiente y a 20 años de la sanción de la Ley de Educación Ambiental en la Ciudad de Buenos Aires, las escuelas de todos los niveles participan de una jornada clave para reflexionar sobre la crisis ecológica y el rol transformador de la educación.
Este 5 de junio, más de mil instituciones educativas porteñas abrirán sus aulas y patios a la reflexión y a la acción, en el marco de la 5ta Jornada de Educación Ambiental, una iniciativa impulsada por Agenda Educativa bajo la Resolución N.º 455/23 del Consejo Federal de Educación. La jornada coincide con el Día Mundial del Ambiente y este año tiene un tinte especial: se cumplen dos décadas de la sanción de la Ley N.º 1687, que consagró el derecho a una educación ambiental integral en la Ciudad de Buenos Aires.
“Este tipo de jornadas nos permite mirar más allá del contenido curricular, y pensar de forma crítica cómo educamos para formar ciudadanos conscientes, capaces de cuidar la vida en todas sus formas”, expresó una docente del programa Escuelas Verdes, una de las líneas que acompaña la planificación de actividades en todos los niveles.
Como periodista y educador, participé en encuentros previos a esta jornada y fui testigo del compromiso que se vive en las escuelas. Este año, los ejes temáticos elegidos no solo invitan a pensar, sino a actuar desde la empatía, el conocimiento y la creatividad. Las propuestas se adaptan según cada etapa educativa:
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Nivel Inicial:
El eje «La valoración, el respeto y el cuidado por la diversidad de seres vivos y entornos naturales» cobra vida a través de experiencias sensoriales: caminatas por patios escolares, recolección de hojas, juegos con agua y barro, e incluso actividades artísticas inspiradas en la naturaleza. El objetivo es claro: despertar en las infancias la curiosidad y el amor por el entorno que habitan. -
Nivel Primario:
Con el eje «El agua, un valioso bien natural común», se apunta a generar conciencia sobre un recurso tan vital como frágil. Las propuestas incluyen desde experimentos con filtración de agua hasta investigaciones sobre el consumo doméstico y la contaminación de ríos. Los docentes cuentan con recursos pedagógicos que cruzan áreas curriculares y permiten un abordaje integral de la problemática. -
Nivel Secundario:
Aquí se aborda la relación entre ambiente y salud bajo el eje «Naturaleza, salud y bienestar socioemocional». En un mundo que parece girar cada vez más rápido, los adolescentes encuentran un espacio para expresar lo que sienten frente a la crisis climática: miedo, angustia, impotencia. Las actividades buscan canalizar estas emociones en proyectos colectivos, como la creación de jardines escolares, la planificación de campañas de concientización o la reflexión sobre el acceso desigual a espacios verdes en la ciudad.
Estas acciones se enmarcan en un contexto crítico. Según datos de la Organización Mundial de la Salud, el 93% de los niños del mundo respiran aire contaminado. A nivel local, informes recientes del Observatorio de Salud Ambiental señalan un aumento en los cuadros de ansiedad vinculados al cambio climático. Por eso, no se trata solo de enseñar sobre el ambiente, sino de educar con el ambiente como protagonista, reconociendo su impacto directo en nuestra salud física y emocional.
Además, el enfoque transversal propuesto por los programas Escuelas Verdes y Ciudadanía Global permite que las actividades se integren con materias como Ciencias Sociales, Tecnología, Educación Artística y Ética, fomentando el pensamiento crítico y la participación ciudadana desde temprana edad.
La 5ta Jornada de Educación Ambiental no es solo una fecha en el calendario: es una oportunidad para repensarnos como educadores, ciudadanos y humanos frente al planeta que habitamos. Como cronista, pero sobre todo como parte de esta comunidad educativa, creo firmemente que sembrar conciencia ambiental hoy es una de las tareas más urgentes y nobles que tenemos por delante. Porque cuidar la Tierra es, también, cuidar nuestro futuro.