Entre historia, arte y modernidad, el Sheraton Buenos Aires Hotel & Convention Center redefine el concepto de hospitalidad cinco estrellas en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Un ícono porteño que combina elegancia, confort y una ubicación inmejorable para quienes buscan vivir la ciudad desde su epicentro más vibrante.

No todos los días se tiene la oportunidad de dormir frente a una postal viva de Buenos Aires. Desde mi llegada al Sheraton Buenos Aires Retiro Hotel & Convention Center, sentí que la ciudad me abrazaba con su mezcla de historia, cultura y modernidad. Entre el murmullo de los árboles de la Plaza San Martín y la vista imponente del puerto, entendí por qué este hotel sigue siendo, después de décadas, uno de los grandes referentes del lujo porteño.

“Queremos que cada huésped viva Buenos Aires desde adentro, con el confort de sentirse en casa, pero rodeado de la elegancia que nos caracteriza”, me contó una de las gerentas de recepción mientras me acompañaba a mi habitación. Esa frase resumió perfectamente la experiencia que estaba por comenzar.

El Sheraton Buenos Aires Hotel & Convention Center, ubicado estratégicamente en el corazón de Retiro, combina más de 800 habitaciones con una propuesta que lo distingue en la escena hotelera de la región.

A solo pasos de la Calle Florida, y a dos kilómetros de la majestuosa Basílica Nuestra Señora del Pilar, el hotel se alza como un refugio urbano ideal para quienes buscan cercanía con los principales puntos de interés sin renunciar al confort de un cinco estrellas.

Durante mi estadía, pude comprobar algunos de los atractivos que lo hacen único:

  • 🏋️‍♂️ Gimnasio y sauna de primer nivel, donde el bienestar y la relajación van de la mano.

  • 🎹 Un piano bar elegante, que invita a disfrutar de cócteles con música en vivo.

  • 🏊‍♀️ Piscina exterior de temporada, perfecta para disfrutar del sol porteño.

  • 🛏️ Habitaciones insonorizadas, con climatizador, Wi-Fi gratuito, TV de pantalla plana y baños de mármol que reflejan la sofisticación clásica del Sheraton.

Cada detalle parece pensado para ofrecer una experiencia completa. Desde el desayuno buffet gratuito, con una tentadora variedad de panes, frutas y delicias locales, hasta el bar junto a la piscina, donde probé un trago fresco mientras contemplaba el atardecer sobre la ciudad.

A su alrededor, el entorno multiplica las opciones:

  • A 500 metros, el MUNTREF Centro de Arte Contemporáneo ofrece una cita imperdible con la cultura.

  • A solo 10 minutos en auto, la Plaza Italia invita a recorrer Palermo y su espíritu bohemio.

  • Muy cerca también se encuentra el Instituto Tecnológico de Buenos Aires (ITBA), símbolo de la educación moderna del país.

  • Y, si se desea un paseo más histórico, el Zanjón de Granados, a 3 km, guarda secretos coloniales de la Buenos Aires más antigua.

Moverse desde el hotel es sencillo: la estación de Retiro está a apenas 650 metros, mientras que la Colección de Arte Amalia Lacroze de Fortabat se alcanza con una caminata de 16 minutos. Todo parece diseñado para que el huésped explore la ciudad con facilidad y estilo.